En el PRI estatal con Ernesto Castillo, en el municipal con Joaquín Berzunza Valladares y con el estratega Roberto Alcalá se hará el mejor trabajo terrestre para fortalecer la confianza en hombres y mujeres que estarán dispuestos a salir con la mejor de las intenciones a favor de la causa de quien propone ideas realistas y no populistas.

CANDILEJAS

Por Candelario Pérez Madero

Se acerca la temporada electoral, campañas irán y vendrán, los partidos políticos con sus mejores hombres y mujeres arman sus equipos para salir a las calles en busca de la confianza, sin lugar a dudas interesante será ver cómo los candidatos se acercan al electorado y ser capaces de entender los códigos paralingüísticos de cada persona, así como de quien les hablará de sus propuestas, decirlas será interesante, cómo mencionarlas, de qué hablar ante una ciudadanía suspicaz, de ahí la pertinencia de instrumentar eventos comunicativos a priori para conocer las condiciones de ambiente de los hablantes.

Se requiere más que políticos experimentados, hoy más que nunca es muy socorrido la presencia de comunicólogos, no comunicadores, expertos en el manejo de teorías del lenguaje aplicando la técnica del speaking, es decir, conocer las situaciones, participantes, fines, actos, llaves, de las que habla el lingüista Jeremy Hinds.

No se ve la presencia de los partidos en movimiento, pero no se duda que están realizando labor de acercamiento, contacto estrecho con ciudadanos de sectores, organizaciones, seccionales, toda la estructura que sostiene a un partido político, es la hora de aplicar formaciones discursivas enfocadas a fortalecer la competencia comunicativa, es momento de saber con quién se cuenta y aplicar para ello también los elementos no lingüísticos para predecir la lealtad y confianza de quienes pueden marcar la diferencia a la hora de la elección.

En el PRI estatal con Ernesto Castillo, en el municipal con Joaquín Berzunza Valladares y con el estratega Roberto Alcalá se hará el mejor trabajo terrestre para fortalecer la confianza en hombres y mujeres que estarán dispuestos a salir con la mejor de las intenciones a favor de la causa de quien propone ideas realistas y no populistas. Ganará el partido sin caer en una actitud astrológica que cuente con una estructura sólida, ordenada, disciplinada y con la lealtad hacia quienes ya le demostraron su voto de confianza en la precandidatura.