Por Candelario Pérez Madero
Un gobernador con buen ánimo, como siempre. El escenario estaba listo, el Centro de Convenciones estaba de gala para escuchar el mensaje del gobernador que por Campeche afirma que “hay que darlo todo” porque quiere que el nombre de este estado que cumple CLX años de su emancipación política siga sembrando, para tener la generación del desarrollo y de la transformación para seguir creciendo en grande.
El sol a todo lo que da. 11:40 am; Camisas blancas a diestra y siniestra, zapatos lustrados, pantalones bien planchados, cabellos con gel, otros con cremas olorosas. Lentes oscuros, algunos por la desvelada del domingo familiar, unos más por el compromiso de su presencia y luego la ausencia tras estar sentados 20 minutos, con lo cual justificaban su asistencia a este informe de anuncios espectaculares de obras que ponen a Campeche en un lugar privilegiado para seguir hablando bien de lo que hace el poder del ejemplo como sostiene el gobernador Alejandro Moreno Cárdenas.
La avenida Costera está sitiada, barras metálicas, patrullas por todos lados, es todo un espectáculo la llegada de los invitados especiales, damas ataviadas con sus mejores galas, unas altas, otras gruesas, pero todas movidas por el interés de ser invitados del mandatario campechano.
No importó la asoleada y la espera, mucho menos la revisada en el acceso, lo importante era estar adentro, o al menos en la sede alterna donde se armó el templete, sillas y una pantalla con buen sonido para escuchar el catálogo de logros y acciones del líder político de este estado.
Todo en orden, la paz y tranquilidad que caracteriza a los campechanos se puso de manifiesto, la disciplina y disposición por atender el llamado del mandatario campechano que con tiempo corrió invitaciones para estar ahí para celebrar la hora y el momento que vive Campeche, ahora que el viento sopla a su favor.
