Seamos razonables, si va a ver un cambio en este país, que sea de mentalidad, dejemos a los políticos que sean ellos los que se digan sus verdades.

Comentario Político

Señores votantes y no votantes por voluntad, abrumada por tantos insultos que leo en las redes sociales me voy a tomar el atrevimiento de darles un consejo, que pueden tomar o dejar libremente. No sin antes decirles que la única intención es recordarles la realidad.
Pues bien, cada seis o tres años veo luchas encarnizadas defendiendo a tal o cual candidato, se dicen demasiadas ofensas, algunas tan graves que son inolvidables. Se genera odio, rencor y deseos de venganza.
Pero cada seis y tres años pasa lo mismo, los de arriba platican, hacen acuerdos, se toman una copa de buen vino, estrechan manos y lazos políticos, presumen a sus seguidores y se les inflama el pecho de orgullo.
Gane quien gane, ganan ellos, ni tú ni yo vemos la diferencia en nuestras vidas y nuestras empresas. Solo los muy cercanos disfrutan las mieles, algunos reciben un trato respetuoso y los de muy abajo una tarjeta con 500 pesos o una despensa, además de la promesa de mejorar su nivel de vida.
Vida que continúa igual. A veces, en contadas ocasiones, llega al poder un actor político que si trabaja, le echa ganas, mejora la vida de los que menos tienen con programas que incentivan la producción y que combaten la pobreza.
Pero no todos trabajan en el mismo sentir y entonces el votante siente que regaló su sufragio y empieza a maquinar su venganza para el próximo proceso electoral.
¡Es en serio tanto odio! No lo haga, somos campechanos, mexicanos, igual de fregados casi todos, no se insulten ni se desgarren por aquellos que en lo secreto son cómplices. ¡Vamos! Razonen su voto, voten por quien se les de la gana, no se ofendan, ni se agredan. Luego se cruzarán en alguna calle y se lanzarán maldiciones entre dientes.
Seamos razonables, si va a ver un cambio en este país, que sea de mentalidad, de respeto, de responsabilidades, de hacer cada uno lo suyo buscando la perfección y dejemos a los políticos que sean ellos los que se digan sus verdades. Muy buenos días. (La gráfica es cortesía de pixabay.com)